Uno de cada tres personas en Venezuela tiene dificultades para llevar a la mesa los alimentos suficientes que cumplan con los estándares requeridos de nutrición, debido a una persistente contracción económica según se publicó en un estudio del Programa Mundial de Alimentos de la Organización de las Naciones Unidas.
El estudio basado en una muestra de 8.375 cuestionarios demostró que la dieta de muchos venezolanos está basada en tubérculos y granos debido a la inflación en Venezuela, que ha dejado sin funcionamiento los salarios. El ingreso mínimo de un trabajador promedio es de 450 mil bolívares y según el último estudio del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros, una familia necesita al menos $300 para cubrir su ingesta mensual.
La inseguridad alimentaria se define como la dificultad que tienen las personas para adquirir los requerimientos dietéticos básicos. En total son 9,3 millones de personas las que se encuentran en estas condiciones en Venezuela.
Estas características de inseguridad alimentaria se convirtieron en un problema a nivel nacional, aunque los estados Delta Amacuro, Amazonas y Falcón tienen niveles especialmente elevados, una de cada cinco personas en las zonas más prósperas se encuentra en esta condición.
El problema parece centrarse más en la dificultad para obtener alimentos que en su disponibilidad. Siete de cada 10 personas reportaron que siempre es posible localizarlos, pero indicaron que es complicado adquirirlos debido a los altos precios. Un 37% reportó que han perdido su trabajo o su negocio debido a la severa contracción económica de Venezuela.