De acuerdo a una investigación realizada por El Espectador de Colombia, Venezuela podría estar a días de apagarse completamente en medio de una crisis eléctrica sin precedente.
Según datos obtenidos directamente de fuentes del Ministerio de Energía Eléctrica de Venezuela, solo uno de los tres grandes transformadores que surten de energía a los 23 estados está en funcionamiento y amenaza con colapsar. Rusia y China quieren ayudar, pero quienes tienen la tecnología para ese tipo de instrumentos son EE. UU. y Alemania. Países que no quieren prestar apoyo al gobierno de Nicolás Maduro.
La fuente, cercana al ministro Igor Gavidia, confirmó que actualmente no existen piezas de recambio para los transformadores que deben ser sustituidos en la central hidroeléctrica Guri y que solo hay tres empresas capaces de conseguirlas: Alstom Power (Estados Unidos), Andritz (Austria) y el Grupo ABB (Alemania).
Dos de los tres transformadores de energía que funcionaban en la central hidroeléctrica Guri, que es la única que surte a los 23 estados del país, colapsaron en marzo y, desde entonces, solo uno asume la carga de todo el país.
La versión oficial señala un saboteo orquestado por Estados Unidos. Sin embargo, la fuente le explicó al diario por qué hay tantos apagones, y tan seguidos.
El 7 de marzo se disparó una alarma de sobrecalentamiento en los tres transformadores. Dos dejaron de funcionar, pero uno resistió la falla. Para evitar su explosión se tuvo que cortar la transmisión de energía. “Si no se resuelve la situación estado por estado, el país entero se puede apagar por más de 39 días o hasta que se tengan los transformadores de recambio”, aseguró el funcionario.
Se une la teoría del desgaste por falta de mantenimiento, aunado a un proceso histórico lleno de errores gerenciales y entramados de corrupción.
Desde el 7 de marzo de este año, cuando el país quedó a oscuras durante más de 72 horas, 31 millones de venezolanos han tenido que soportar cuatro cortes de energía masivos que siguen trayendo consecuencias diarias a estados como Zulia, sin mencionar las pérdidas millonarias.