La experiencia pedagógica desde el juego es la columna en el proyecto de Ivette Géraud: Virtuosi Kids Box, la primera caja de iniciación musical para padres y bebés.
“Mi pedagogía es algo diferente y eso gusta mucho a los padres y, también a los niños. Es aprender mientras se juega. Un ejercicio que enriquece mucho la relación familiar, y también explora al máximo la curiosidad del niño por la música. Ella se ha nutrido del lado experimental, la teoría me ha servido como hipótesis, aprendí a desarrollar una serie de herramientas y técnicas pedagógicas en donde el feeling le dan al papá o a la mamá la posibilidad aprender de forma divertida”, explicó.
Ivette nació en Caracas en 1987 pero creció en el estado Portuguesa, una zona agrícola y llena de música. Alternó sus estudios formales con clases de música. Inició en el Sistema Nacional de Orquestas, con apenas 11 años.
Sus estudios la llevaron primero a Caracas y luego a Francia donde pudo estudiar con maravillosos maestros del clarinete como Alain Damiens, Solista del Ensamble Intercontemporáneo, así como también con Richard Vieille y Michel Arrignon, tres músicos que han influido mucho en la formación de la franco-venezolana.
El proyecto Virtuosi Kids (niño virtuoso en inglés) consiste en una cajas que contienen un kit de iniciación a la música dirigido a los padres y a los bebés, con el objetivo de incentivar la experiencia lúdica dentro del aprendizaje de los más pequeños.