Le negaron la entrada a un café a la primera ministra porque había muchas personas
¿Qué tan frecuente es ver a un líder político entrar en un café? Pero ¿Qué tan frecuente es ver que le rechacen la entrada? No es raro en Nueva Zelanda.
El sábado cuando la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern fue rechazada de un café popular en Wellington que estaba lleno debido a las medidas de distanciamiento del coronavirus.
«Omg Jacinda Ardern acaba de intentar entrar en Olive y fue rechazada porque está llena», escribió un usuario de Twitter aproximadamente al mediodía.
Los restaurantes están limitados a un máximo de 100 personas y al menos 1 metro entre grupos sentados.
El compañero de Arden, Clarke Gayford, respondió a su tuit unas horas más tarde. «Tengo que asumir la responsabilidad de esto, no me organicé y reservé en ningún lado», escribió. «Fue muy amable de su parte perseguirnos cuando un lugar se liberó. Servicio A +».
Sin dar su nombre, el dueño del restaurante le dijo al New Zealand Herald que estaba complacido de hablar sobre «algo alegre y divertido» después de «el drama y el estrés» de los dos meses anteriores.
Confirmó que no se hicieron excepciones para Ardern y que ella y Gayford fueron rechazados inicialmente por el gerente del restaurante. Sin embargo, el gerente corrió calle abajo minutos más tarde, luego de que una mesa se volviera libre, lo que enfatizó es una cortesía extendida a otros clientes.
Menos de 1,500 personas se infectaron con la COVID-19 en Nueva Zelanda, y 21 personas murieron. Su estrategia ha sido de las más exitosas en el mundo.