Regionales / Marrón

Tectónica de placas: Sismos en Carabobo

Venezuela es un país sísmico. Al final del 2018,  principios de 2019, ha dado muestras claras sobre el movimiento de sus placas tectónicas, para la explicación de este tipo de movimiento existe la teoría de Tectónica de Placas.

Narra cómo es el movimiento de las placas en el manto terrestre y los deslizamientos que se producen, explica también la formación de cadenas montañosas.

El contacto por fricción entre las placas produce irremediablemente la mayoría de los terremotos. El estado Carabobo, se ve afectado por la falla de San Sebastián, la misma que llega hasta el estado Sucre donde cobra el nombre de Falla El Pilar.

El estado Carabobo no siempre fue una zona con gran actividad sísmica, existía la posibilidad de un sismo, pero no con la frecuencia actual. Como una nueva etapa en el reciclaje de las capas, la realidad de hoy es distinta.

La madrugada del 27 de diciembre, a las 5:20 de la mañana, marcó un antes y un después en la urbanización Campo Alegre al Noreste de Valencia. En medio del sueño y el frío de diciembre, la avenida 109 estaba congestionada de vecinos que no sabían a donde ir, los edificios se vaciaron, los animales estaban nerviosos y las risas del temor se apoderaron en la oscuridad. Un sismo de 4.9 sacudió la zona central del país, casi al mismo tiempo hubo una segunda réplica, y la tercera de 4.5 logró hacer gritar y correr a las familias fuera de sus casas buscando un lugar seguro.

Luego de esos dos episodios, se registraron más de 28 réplicas en ese día. Solo el 3 de enero se registraron 14 sismos.

Las noches no fueron las mismas desde el 27, cualquier vibración que producía un sonido parecido al estruendo que anuncia el movimiento telúrico, es sinónimo de alerta. Desde el 27 las madrugadas se cargan de nerviosismo en las casas valencianas.

¿Cuándo comenzaron a moverse las placas? Este proceso existe desde el inicio del planeta, es decir hace 4.500 millones de años.

El Planeta Tierra es comparado con su hermano Venus, ambos tienen dimensiones parecidas y componentes rocosos semejantes, pero Venus no tiene placas tectónicas y la Tierra sí, los científicos quieren saber por qué.

La tierra necesita perder calor

Desde hace varios siglos, cuando los cartógrafos comenzaron a ver cómo se complementaban las distintas masas de la tierra, se tiene la idea de que los continentes no estaban fijos. El mejor ejemplo de estos pareciera verse cómo encaja la parte Noroeste de Suramérica en el hueco de la costa suroccidental de África.

Pero no fue sino hasta el siglo XX que la teoría  de “La Deriva Continental” cobró mayor fuerza, con la comprobación de la existencia de un motor subterráneo que permitió el movimiento de estas grandes masas de tierra.

En total la tierra está fragmentada en 8 o 9 grandes partes, y 6 partes más pequeñas. Una combinación de placas oceánicas relativamente delgadas y densas que surcan hacia abajo, y placas continentales más gruesas y ligeras que se tambalean hacia arriba.

En las grietas grandes del fondo del mar, sube la roca que se derrite procedente del manto subyacente y se incorpora a las placas oceánicas. En otros puntos de fractura de la corteza, en una acción llamada subducción, las placas oceánicas vuelven a hundir su masa hacia adentro, que es devorada y fundida en el manto.

De la misma manera, las placas continentales que surcan en lo alto son empujadas por la actividad magmática de abajo y estas se deslizan a un ritmo promedio que va de 2,5 a 5 centímetros al año, a veces chocando entre sí para formar algo como la cordillera del Himalaya, por ejemplo, o alejándose para formar el gran valle del Rift de África.

Para Peter Cawood, especialista en Ciencias de la Tierra de la Universidad Monash de Australia, “la tectónica de placas es una forma relativamente inocua de que la Tierra pierda calor”, señaló.

“Existen eventos catastróficos en zonas localizadas, como los terremotos y los tsunamis, pero este mecanismo permite que la Tierra conserve en general un ambiente más estable y benigno”, añadió.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *