Durante el año 2017, en algunos estados del país se registraron aproximadamente diez robos de cables por día, esto representa 40 robos al mes. En la zona sur de la ciudad de Valencia, se reportan incluso hasta dos años sin servicio de internet. La reposición del material por parte de la principal empresa de telecomunicaciones de Venezuela, Cantv, unido a la frecuencia de robos, hace cuesta arriba el restablecimiento del servicio.
Sin embargo, de acuerdo al sitio web oficial de Cantv, se solventaron 18.626 averías en las últimas dos semanas de noviembre del año pasado y se recuperaron 26.917 metros de cable. ¿Por qué sigue pasando?
En la Gaceta Oficial N°41.125 a través del decreto presidencial 2.795, se denomina este tipo de material como estratégico y vital para el desarrollo de la industria nacional. Legalmente solo el Ejecutivo Nacional tiene autorización de comercializar con residuos sólidos de aluminio, hierro, bronce, acero, níquel y especialmente el cobre.
Uno de los principales componentes del cableado es el cobre, que está cotizado en el mercado según el sitio web https://www.preciooro.com en $6,382 por kilo. Para el 2017, un kilo de cobre era pagado en 25 mil bolívares pero en la frontera con Colombia se podía vender hasta en $50.
Los cables que se encuentran en áreas externas, denominados Supertel, pueden encontrarse en páginas de ventas online entre 450 mil y 600 mil bolívares el metro. ¿Negocio redondo?
Delito de carácter Internacional
En España, específicamente en el municipio ciudadrealeño de Santa Cruz de Mudela, los agentes de seguridad lograron interceptar una camioneta con 4 mil kilos de cable de cobre, robados de una planta fotovoltaica de Montiel, valorados en más de 500 mil euros. La denominada operación “Cobreco”, logró detener a 26 personas y 16 están siendo investigadas.
Conectividad necesaria
Estar conectados a internet es de alguna forma la manera más sencilla de traspasar la frontera y poder tener una opción para ejercer algún oficio digital que permita a muchos venezolanos obtener ingresos trabajando desde casa.
Periodistas, diseñadores, desarrolladores web, músicos, pintores y hasta escultores, tienen en internet la oportunidad de dar a conocer su trabajo. Hoy esa oportunidad en Venezuela está disminuida por el robo del cableado y por ende las fallas constantes en el servicio.
En 1990 estar conectados a internet era una diversión o un lujo; hoy es necesario para el comerciante tener un punto de venta. Igualmente, trabajar desde casa se ha convertido en un oficio común más por necesidad que por gusto, este tipo de trabajos permite regular el uso de los vehículos y el grado de exposición a la inseguridad. En promedio un trabajador freelance pasa más de 11 horas frente a un equipo hasta que los delincuentes que no pudieron robarlo en la calle, deciden robar el cableado que da el servicio a la comunidad.