Aunque la actividad turística nacional parece tener un descontrolado aumento, hay parques nacionales que están corriendo grave peligro por la proliferación de un coral invasor. San Esteban, Mochima y el Parque Nacional Morrocoy están en la mira.
El coral fue descubierto en el año 2007 cerca de Valle Seco e Isla del Mono, en la bahía de Conoma. El hallazgo lo hizo el director del Proyecto Unomia y cofundador de Fundación La Tortuga, el biólogo marino Juan Pedro Ruiz.
«Se estaba haciendo un estudio de impacto ambiental en la comunidad de Valle Seco y buceando nuestro director Juan Pedro Ruiz vio esta especie que inmediatamente reconoció que no era de aquí», dijo Mariano Oñoro, Coordinador de Unomia project.
Proyecto Unomia está dirigido por la Fundación La Tortuga, organización con 17 años de trayectoria, en alianza con la Fundación La Salle de Ciencias Naturales, que cuenta con más de 65 años en el país, además de la asesoría del Dr. Yehuda Benayahu de la Universidad de Tel Aviv en Israel.
El proyecto es la entidad que hace frente al problema y necesitan apoyo por eso está a disposición del público la campaña para recaudar fondos en la plataforma Gofundme.
La pesca artesanal y el turismo son dos de los rubros más afectados, los corales representan fuente de alimentos para algunas especies que hoy no se ven. Mochima y Morrocoy dejan de ser atractivas para turistas que practican actividades submarinas, cada vez son menos los corales con llamativos colores, el color característico de la invasión es una gran alfombra marrón.
La especie invasora ha conquistado zonas que son irrecuperables pero hay otras partes donde se puede controlar.