Fue el sábado 6 de agosto cuando la lluvia comenzó. Por más de cuatro horas el intenso aguacero arropó al pueblo de Canoabo, parroquia del municipio Bejuma, y uno de los asentamientos más antiguos del estado Carabobo. Como consecuencia más de 200 familias han sido afectadas.
Los ríos Capa y Los Naranjos se desbordaron inminentemente y anegaron las principales calles y avenidas de Canoabo. «Damos gracias a Dios que no hubo pérdida humana, pero son grandes las pérdidas materiales, en cuanto lencería, muebles y dos familias perdieron gran parte de sus casas», contó Gloria Martínez, custodia de la cofradía Diablos de Canoabo y habitante de la comunidad desde su nacimiento.
Las consecuencias siguieron para el pueblo. El río se llevó algunas tuberías, por tanto algunas familias no han contado con el servicio de agua desde el fin de semana, en la carretera que da acceso a la población se han contabilizado al menos 17 derrumbes.
Al respecto, varios centros de acopio se establecieron en distintos municipios de Carabobo para ayudar a las familias que resultaron afectadas por las inundaciones.
Los organizadores de la actividad, representantes de Carabobo es Cacao, afirmaron que se necesitan alimentos no perecederos, medicinas, ropa en buen estado, sábanas y colchonetas. Los centros de acopio se dispusieron en Bombón Valle de Canoabo y pastelería Canoabo en el centro comercial Las Chimeneas de Valencia; la sede de Cacao Cultura ubicado en el Nautilus Jardín Gourmet en la avenida Bolívar norte de Valencia.
También se pueden llevar las donaciones a Chocolate 20.20 en San Diego, sector Sabana del Medio, a 50 metros de la ferretería Kipo y en Puerto Cabello en la sede de Chocolates Cocoa, calle Puerto Cabello, a cien metros de la puerta 7.
«Este fue un hecho nunca visto», agregó Gloria. «El río se desbordaba, pero solo por las orillas, y en esta oportunidad gran parte del pueblo quedó anegado».
La comunidad también pidió atención a las autoridades para el dragado del río, pues lo habían solicitado en ocasiones anteriores sin obtener respuesta; a pesar de ser una comunidad geográficamente pequeña son un impulso agroturístico, agroecológico y agroeconómico para el estado.